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Has decidido aprender Excel por tu cuenta. Lo necesitas.
¡Muy bien!
O tal vez, ¿no tanto?
La mejor parte hasta este momento, es que has tomado una decisión; pero ¿qué tan acertada ha sido tu decisión de hacerlo por tu cuenta?
¿O qué tan acertada ha sido la elección del curso en el que te has inscrito?
Y es que muchas veces te resulta difícil aprender Excel, como otras cosas en esta vida. Lo peor es que no sabes por qué.
“Si yo soy excelente con los números.”
“A mi me encantan las computadoras, no entiendo por qué Excel me está dando tanto trabajo.”
Si te está sucediendo algo parecido a esta historia que te estoy contando, la entrada de hoy va para ti exclusivamente.
Sigue leyendo porque voy a contarte las razones que, en mi opinión, son las causantes de que Excel te esté dando más pelea de la necesaria.
No tiene, ni debe ser así; pero puede llegar a serlo.
Como todas las demás cosas que haces en tu vida, aprender Excel debería de ser disfrutado para sacarle el máximo provecho a esta gran herramienta.
Pero no siempre esto es así. Lo cierto es que muchas veces las personas abandonan su aprendizaje debido a las razones que ya te he comentado en algún momento y que, a continuación, voy a resumirte en esta entrada.
Sí. Navegas sin un rumbo fijo y te pierdes entre muchos tutoriales, apuntes y soluciones muchas veces incompletas o que no se adaptan específicamente a tu situación.
Y esto es normal. La única persona que conoce exactamente tus necesidades eres tú. Es por esto que no siempre resulta sencillo encontrar esa solución entre los resultados que te arroja Google.
Ni qué decir, si no tienes mucha experiencia realizando búsquedas. Son tantos resultados que a veces la buena información queda sepultada por ahí… Entre montones de páginas y blogs.
Necesitas una dirección y si eres un completo novato o una completa novata, esto se va a poner muy cansino y terminarás por abandonar antes de tiempo.
Si estás en un curso de Excel y su estructura es demasiado rígida y lineal, entonces lo más seguro es que te aburras pronto y tu grado de atención caiga en picada.
Y si nos ponemos a pensar en la cantidad de elementos distractores que hoy en día existen: Facebook, Twitter, Youtube, Instagram… La cosa comienza a complicarse aún más.
Son muchas las personas que abandonan un curso de Excel al comenzar a ver la típica estructura en la que vas viendo cada elemento, cada componente en detalle y sin mostrar cómo utilizarla para resolver un problema.
¿De eso se trata, no? Una herramienta resuelve problemas.
Si un curso, ya sea online o presencial, se desenvuelve de manera lenta, no es dinámico y es demasiado lineal… Lo más seguro es que no tengas ganas de ir a la siguiente clase.
Esta es la parte en la que tú sueles ser el principal responsable.
Cierto es que a muy pocos les sobra el dinero, pero también es cierto que aún teniendo la posibilidad de acceder a un curso, muchas veces no tomas la decisión de hacerlo.
Un curso llevado por un mentor que domine la materia y que además conozca cuáles son los problemas a los que te enfrentas, podrá guiarte por el camino correcto y en la dirección adecuada.
¿Qué beneficio te representa esto a ti?
Ahorro de tiempo. ¡Mucho tiempo!
Y el tiempo es dinero, ya lo sabes. Así que a la larga, ahorras dinero.
Imagínate si, para aprender a usar tablas dinámicas por tu cuenta, tuvieras que tomarte unos tres meses mientras que en un curso lo hicieras en una semana.
Sí, tres meses. No es una exageración. Si vas sin rumbo, no tienes un plan de estudios ni sabes lo que tienes que aprender y en qué orden… Si mientras buscas cosas en Google, te vas distrayendo con otras cosas que van saliendo por ahí… Tres meses me parece una estimación muy realista.
¿Cuántas horas de tu tiempo malgastaste en tres meses?
¿Cuánto vale cada hora de tu tiempo?
Piénsalo y cuando tengas estos dos números, entonces multiplícalos entre sí.
¿Ahora puedes ver cuánto dinero estás gastando en horas mal utilizadas?
Esta parte es difícil de decir, pero lo cierto es que sucede.
En ocasiones, tu mentor no disfruta lo que está haciendo. Entonces no es tu mentor, es la persona que tienes que ver todos los días en el instituto y/o en las clases virtuales.
Si tu mentor no disfruta, entonces tú no disfrutas. Y si no disfrutas lo que estás haciendo, entonces no lo estarás haciendo bien, como ya te comenté en el primer punto de esta entrada.
De nuevo, la pelota está en tu cancha.
Si ya decidiste dar el paso de invertir en un curso de calidad, la cosa no termina allí. Tienes que ser persistente, comprometerte a realizar y completar todos los pasos sugeridos (o, por qué no, exigidos) por tu mentor y por el plan de estudios de dicho curso.
No cometas el error de pensar que pagando por un curso, inmediatamente todo va a resultar fácil como por arte de magia y que la responsabilidad de que te vaya bien en el curso es enteramente de tu mentor. No.
[tuitealo]La responsabilidad de tu bienestar no se delega.[/tuitealo]
La responsabilidad de tu bienestar no se delega.
— Raymundo Ycaza M. (@RaymundoYcaza) Mayo 7, 2015
No importa si has invertido en un curso premium y has elegido al mejor mentor que pudiste encontrar. Incluso de poco sirve que tengas la disciplina de estar puntual todos los días en tus clases y cumplas con premura con todas tus tareas asignadas. Si no tienes un objetivo definido, será poco lo que avances con Excel.
Aprender Excel debe tener un objetivo, como todo aquello en lo que inviertas tu tiempo.
Cuando te digas a ti misma o a ti mismo “Quiero aprender Excel”, inmediatamente pregúntate “¿Para qué?“.
Si no tienes una respuesta convincente, lo mejor es que te replantees el asunto. El tiempo es algo que, filosofías aparte, no se puede recuperar.
Necesitas una dirección y un sentido para aprender Excel y tener un objetivo claro, hará que el viaje valga la pena, que recobres fuerzas y ánimo cuando estés por abandonar, tan solo recordando tu objetivo y por que solo así sabrás si estás avanzando y cuánto.
Así que piénsalo bien antes de tomar la decisión de tomar un curso, pero recuerda que no tomar una decisión y seguir perdiendo tu tiempo buscando en Google todos los días porciones de información que no encajan entre sí, puede ser igual de perjudicial o incluso peor.
¡Nos vemos!
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